Las transformaciones exigen tiempo. En el caso de los comportamientos individuales, 66 días bastan para cambiar un hábito. Nuestro cerebro es capaz de reorganizarse si tiene interés en ello. En el caso de las empresas, el reto es aún mayor. Integrar el propósito del bienestar en el ADN corporativo exige un mayor esfuerzo tanto de la dirección como de los empleados, que deben interiorizar de manera natural la cultura saludable.

Los beneficios asociados al bienestar en la empresa son de sobra conocidos. Pero a la hora de poner en marcha un programa, existe cierto riesgo de que pasado el “boom” inicial, pierda su eficacia.

Por eso, la pregunta del millón que cualquier CEO debería plantearse hoy es la siguiente: ahora que mis empleados han tomado conciencia de la importancia del bienestar y la salud, ¿cómo consigo que esa situación perdure una vez que hayamos superado la pandemia? ¿Cómo mantenemos en el tiempo los beneficios del programa de bienestar que hemos puesto en marcha?

¿Sabes cómo un programa de bienestar puede unir a tus equipos estén donde estén o sin importar el rol que tengan en la compañía? Descúbrelo a través de este libro blanco que rompe todas las barreras del trabajo en remoto y te da las claves para crear una sólida sensación de pertenencia.

Cinco pasos para una estrategia de bienestar efectiva

La respuesta dependerá de las iniciativas que esa empresa ponga en marcha para fidelizar a sus trabajadores en torno a ese propósito. Una de las mejores formas de definir una estrategia de bienestar es recurriendo a compañías especializadas en la creación de este tipo de programas, como United Heroes. Esta empresa, por ejemplo, proporciona herramientas tecnológicas que permiten involucrar a nuestros empleados en unos hábitos de vida saludables, así como conseguir que nuestra cultura corporativa incorpore de una manera natural los beneficios asociados a la actividad física. Sus expertos nos resumen en 5 claves los factores de éxito de todo programa de bienestar.

1. Marca un objetivo 

Desde el inicio es indispensable configurar la meta que se desea alcanzar. El área de gestión de personas debe establecer objetivos medibles (KPIs) con los que pueda hacer seguimiento y evaluar la efectividad de las acciones tomadas. Si en cualquier fase del proceso detectamos que el retorno de la inversión se reduce, podremos adoptar acciones preventivas para reactivarlo y así mantener los índices de absentismo laboral o productividad que hayamos fijado.

2. Facilita una herramienta digital

Vivimos en una sociedad conectada en la que el deporte no es ajeno a esta tendencia. Según un estudio de Odoxa sobre la innovación en el deporte, hoy en día el 31% de los españoles utilizan una app deportiva. Por tanto, la primera premisa para que un programa de bienestar tenga éxito es que sea accesible a todos los empleados, estén donde estén o con independencia del dispositivo que elijan para conectarse.

El uso de tecnología digital hará que el programa sea más atractivo y dinámico. Además puede ser un servicio complementario a las actuales instalaciones deportivas de la empresa. Y, en caso de no disponer de ellas, nos evita tener que invertir en un gimnasio en cada una de las sedes corporativas.

Crear o utilizar una aplicación móvil también es una excelente manera de involucrar al equipo porque permite a cada usuario acceder a un panel personalizado para realizar un seguimiento de su actividad y supervisar su progreso. Y si el programa se ha estructurado por equipos, fortaleceremos la cohesión de grupo. 

3. Crea retos

Uno de los mayores factores de engagement es la creación de retos, tanto individuales como colectivos. Establecer desafíos individuales a través de dinámicas de gamificación (obtención de puntos, regalos o experiencias gracias al rendimiento deportivo) o mostrando la progresión son excelente un factor de fidelización. Si además los resultados contribuyen a un bien común, animaremos aún más a los empleados a superarse a sí mismos y mantenerse motivados a medida que pasan las semanas. Los retos crean una competencia saludable, por ejemplo, dentro de los equipos de trabajo o departamentos.

4. Cuéntalo

Comunicar el programa es fundamental. En la medida en que los trabajadores conozcan y entiendan el programa aumentará el compromiso y sentido de pertenencia por el mismo. Por ejemplo, puedes invitarles a un evento de lanzamiento. Dado que cada actividad representa una inversión, debe ser promocionada de tal forma que logre la participación necesaria para alcanzar el objetivo de retorno. Por este motivo, es clave contar con un plan de comunicación interna que, a través de diferentes contenidos y formatos que distribuyamos entre los empleados periódicamente, realice un seguimiento del plan.

 5. Vincula deporte y solidaridad

Incluir el bienestar en la propuesta de valor de nuestra compañía es fundamental. Así lo demandan la sociedad y el talento joven que se incorpora al ámbito laboral. En el mundo anglosajón esto es algo que muchas empresas llevan practicando desde finales del siglo pasado. Primero incluyendo la práctica deportiva a sus estrategias de responsabilidad social corporativa (RSC) y, más tarde, situando el bienestar en el centro de su estrategia de negocio.

La experiencia en España es más limitada y tiene su origen en el boom del running que se ha producido durante la última década. En estos años, las carreras populares han ido sumando millones de adeptos, lo que ha despertado en muchas empresas el interés por sumarse a un compromiso que refleja valores como la cooperación y el trabajo en equipo, la superación individual y colectiva, la motivación, el buen clima laboral, y el bienestar físico y mental de las personas. Eso sumado a un objetivo solidario multiplica el efecto motivador en el equipo.

Y es que pocas cosas hay más nobles y nos reconforten tanto como trabajar unidos por un bien común que trasciende a nosotros mismos. Vincular a los empleados en proyectos de impacto social de la empresa (los kilómetros se convierten en donaciones o en dinero para el banco de alimentos, por ejemplo) afianza el orgullo de pertenencia del empleado hacia una marca con verdaderos valores. No hay mejor recompensa: desde nuestro bienestar contribuyamos al bienestar de los más necesitados

¿Y en tiempos de pandemia qué hacemos?

Aunque la pandemia impide la celebración de acontecimientos deportivos de manera presencial, muchas empresas los han sustituido por carreras virtuales y otros eventos a distancia. Al fin y al cabo, las organizaciones tienen a su disposición nuevas tecnologías que les permiten mantener activos sus programas de bienestar, sus herramientas de gamificación o plataformas de seguimiento.

Esa es precisamente la esencia de la tecnología proporcionada por United Heroes. Tanto su sitio web como su app móvil permiten registrar más de 50 actividades deportivas diferentes. De igual modo, se ofrecen consejos deportivos a los usuarios, se les permite establecer rankings por equipos y cada uno puede medir su progresión individual. Y facilita medir el impacto del programa de bienestar en los KPIs fijados por la dirección de la compañía.

Al final, el resultado es una mayor motivación de los profesionales y una mayor cohesión de nuestros equipos de trabajo.

United Heroes despierta al héroe que llevas dentro. Es un programa de Bienestar y deporte cuya misión es activar al 100% de los empleados de las empresas incorporando en su vida hábitos saludables, divulgando así una cultura corporativa positiva alrededor del bienestar y los beneficios de la actividad física. Una comunidad de más de 1,5M de héroes en la que ya confían empresas como Bankinter, Orange, PWC, Total o Roche. Y sus empleados, también.