Metaverso: ¿el internet del futuro para las organizaciones?

El metaverso permitirá no sólo explorar el conocimiento previo, sino interactuar con millones de personas con los mismos intereses y gustos. Las ideas vuelan y la innovación alcanza cotas muy altas. Ante este cambio de contexto ¿Cómo pueden las organizaciones hacer negocio y crear oportunidades en el nuevo universo post-internet?

En el Desayuno Canal Ceo del día 27 de abril, en La Salle se han destacado interesantes lecciones de la mano de expertos en Metaverso: Edgar Martin- Blas, autor de «Metaverso pioneros en un viaje más allá de la realidad» y CEO de Virtual Voyagers; Carmen Chicharro, directora Comercial, de Marketing e Innovación de Metrovacesa; Jordi Conejero, CMO de Union Avatars y Ricardo Mejía, filósofo. Y es que, detrás de esta tecnología disruptiva, hay un mundo por descubrir que cambia el modelo actual de relación entre empresa y usuario/ cliente. Sin olvidar, además, las connotaciones éticas que ello puede suponer.

El encuentro fue impulsado por Nacex, Number 16 School, Eurofirms, Agicap y Lid Editorial.

“El metaverso es el nuevo internet tridimensional (3D), la gran diferencia con el anterior concepto de internet es que aquí hacemos actividades, pertenecemos a un mundo que se despliega ante nosotros y es susceptible de ser modificado según nuestras actuaciones”, Edgar Martín-Blas

Metaverso: huir de la obsolescencia 

Para Jordi Conejero, CMO de Union Avatars, existe un objetivo común entre muchas de las empresas que han apostado por la inclusión del metaverso: atraer al target centrado en la generación Z. La clave es “no quedarse obsoletas”. Por ello, las empresas de moda, como Gucci, “están aprovechando estas plataformas inmersivas, puesto que le ayudan a mejorar extraordinariamente la venta de productos y el tráfico a su web”.

El coste de no estar en el metaverso implica perder eficiencia y productividad

Pero no sólo la moda. Otros sectores considerados más tradicionales, como el inmobiliario, también han dado el salto a esta tecnología. Carmen Chicharro, directora Comercial, Marketing e Innovación de Metrovacesa lo ejemplificaba de este modo. “Estas herramientas nos permiten adaptarnos a la visión del cliente, que percibe su vivienda virtual como la real. Incluso, da pie a que otras marcas (por ejemplo, decoración), formen parte de nuestro proyecto para que la visión sea global”.

Chicharro destacó: “nuestro proyecto basado en metaverso, realizado en Málaga, se tradujo en un incremento de un 100% de visitas y en un 40% de ventas”. Datos nada desdeñables, al que hay que añadir uno más para destacar la importancia que está adquiriendo este segmento tecnológico en nuestro país: España es el cuarto país del mundo que ha traído más inversión para potenciar el metaverso.

La irrupción del metaverso en las organizaciones abre una brecha importante, la ética, que es destacada por el filósofo Ricardo Mejía. Para este experto, “El metaverso ha de transformarse en endoscopio ético y social. Estamos ante un dilema y un reto ético, la pérdida del principio de la realidad”

Uno de los grandes inputs que hacen del metaverso una herramienta importante para las organizaciones es que permite crear comunidad, tener una relación más cercana con tu target

Metaverso: ¿cómo se puede adaptar nuestra organización?

“La combinación real y virtual posibilitará la aparición de muchos espectáculos donde la limitación está más en la imaginación que en la capacidad técnica, ya que prácticamente todo será posible” Este mundo, a priori ilimitado de posibilidades, es para el experto Edgar Martin la clave de su crecimiento e incorporación a todos los sectores. “A nivel presupuestario, depende de la inversión, pero lo importante es “estar”. Cuando innovas, todo cambia y puedes encontrar nuevas audiencias”. En definitiva, tener una relación más cercana con tu target.

Esta idea es remarcada por Jordi Conejero, CMO de Union Avatars, quién matiza el coste de no estar en el metaverso, resumido en tres aspectos:

• Es la herramienta que puede evitar la “caducidad” de la marca: un “tren” que no se le puede escapar.

Evade perder eficiencia y productividad interna, sobre todo en materia de educación y formación hacia sus empleados.

• Puede ser el revulsivo para lograr situarte como empresa puntera. No hace falta ser muy grande o tener un gran presupuesto. El metaverso no tiene límites y, con creatividad -subraya este experto- se puede competir con grandes empresas.

El metaverso ha de transformarse en endoscopio ético y social. Estamos ante un dilema y un reto ético, la pérdida del principio de la realidad

En definitiva, el metaverso es ya una realidad, a la que no pueden quedar ajenas las organizaciones. Lo que inicialmente era una evolución del Internet 2D ahora ya es actualidad palpable, pero está en sus inicios.

Algo, puntualiza Edgar Martín para finalizar “que aún se está construyendo pero que en unos años lo veremos, en las organizaciones, implementado en todo su esplendor”.