El trabajo híbrido ha venido para quedarse, añadiendo un nivel de complejidad al liderazgo. El “mundo” híbrido supone un importante desafío a los líderes, que deben realizar un ejercicio de replanteamiento de sus metas y enfoques para lograr mejores estrategias que impliquen a sus equipos generando confianza y valor.

El trabajo híbrido, en el que se alterna el trabajo en la oficina y a distancia supone, según un estudio de Economist Impact, un incremento sustancial en el bienestar individual, donde las nuevas tecnologías que permiten flexibilidad horaria y de ubicación figuran entre las principales tendencias.

Más que nunca, los líderes «del futuro» tendrán que capacitar a sus equipos para una actualización constante. Deben empezar por ser conscientes de la importancia de adaptarse a los nuevos conocimientos y competencias que deben abordar. Solo de este modo contarán con las herramientas necesarias, tanto tecnológicas como formativas, para los retos a los que se enfrentan.

«A los líderes se les pide que sean más flexibles en el mundo híbrido. El primer paso para que los equipos sean más responsables es confiar en sus capacidades para superar nuevos retos» Carolina Gracia Moreno Jefa de proyecto y consultora de diseño en Cegos France

Está claro que la revolución digital y las disrupciones tecnológicas están provocando cambios profundos en las competencias de los empleados, ya sean técnicas, de comportamiento o relacionadas con la línea de negocio. En un reciente estudio del Grupo Cegos, se subrayaba la importancia de adecuarse al nuevo escenario laboral, por parte de los equipos y, por supuesto, de sus líderes.  Sin embargo, el trabajo híbrido tiene algunos problemas no menores, destaca el citado informe,  que hay que resolver para que el modelo sea sostenible y tenga éxito a largo plazo.

¿Qué puede hacer el directivo para lograr el éxito a largo plazo del modelo híbrido?

¿Cómo responder ante esta nueva realidad de la irrupción del trabajado híbrido?  El desarrollo de competencias específicas para ejecutivos, directivos y equipos se ha convertido en algo estratégico, por lo que el enfoque global de la empresa debería centrarse en la capacidad de anticiparse desarrollando un aprendizaje continuo.

Por otro lado, subraya el informe del Grupo Cegos, sobre todo tras la pandemia, se ha producido una necesidad generalizada de que los empleados aprendan rápidamente a utilizar las herramientas de conferencia o colaboración a distancia y a organizarse en esta nueva forma de trabajar. Hay que focalizarse en la importancia de mejorar las competencias, un aspecto que se ha convertido en una preocupación central en todos los niveles de la empresa, sobre todo en los directivos.

Una vez que la nueva cultura de trabajo híbrida está en la agenda, los líderes deben focalizar su labor en los siguientes puntos clave:

1.- Reinventar el espacio de trabajo híbrido para garantizar el bienestar en el trabajo, independientemente de dónde se encuentre el equipo. Dado que el mejor recurso de la empresa es su gente, las personas deben tener la opción de trabajar en su oficina, en casa o en otras opciones de trabajo flexible.

2.-Ampliar la formación de los empleados actuales en habilidades de comunicación internacional y contratar a empleados que ya cuenten con ellas.

3.- Establecer criterios claros en cuanto a las metas y misión de las organizaciones para alcanzar objetivos comunes.

4.- Priorizar modelos empresariales flexibles y digitales.

El trabajo híbrido es una oportunidad para acelerar la transformación de las organizaciones en un nuevo orden global que es frágil, ansioso, no lineal e incomprensible (BANI)

De “Gran dimisión” a la “Gran Remodelación”: ¿Cómo retener el talento?

El trabajo híbrido es una oportunidad para acelerar la transformación de las organizaciones en un nuevo orden global que es frágil, ansioso, no lineal e incomprensible (BANI).

Ante este nuevo contexto empresarial, las empresas deben adoptar, según los expertos,  un enfoque de gestión «más amable». Eso significa que la labor del líder debe focalizarse, paralelamente, en el bienestar de los equipos, tener en cuenta sus sentimientos y emociones y captar las “señales de auxilio”, a pesar de la distancia, para fomentar el bienestar en sus equipos. El líder debe considerar una serie de soluciones, como establecer procedimientos para detectar cualquier síntoma que fomente la cultura empresarial tóxica y organizar eventos para evitar que los equipos pierdan el contacto social entre sí.  Todos los directivos deben sentirse implicados, por tanto, en el bienestar de sus equipos

Como resultado, la retención del talento es ahora una prioridad para las empresas que han sufrido el impacto de un número considerable de renuncias. El fenómeno, conocido como «The Great Reshuffle» (la gran remodelación), es la búsqueda de nuevos empleos con un mejor equilibrio entre vida laboral y personal es la respuesta a la “Gran dimisión”.

¿Cómo puede el líder responder con claridad a esta nueva realidad, para fidelizar el talento?

1) Identificando las competencias que se demandarán en el futuro, permitiendo que el equipo se perfeccione y se sienta comprometido con la organización.

2) Proponiendo planes de desarrollo.  Esto hace que permanezcan conectados y leales a la organización. La fidelización del talento actúa como un compromiso para todas las personas de la empresa.

El papel del líder, clave para poder asumir los nuevos desafíos

Una de las claves para que el modelo híbrido alcance todo su potencial en las organizaciones reside en que los líderes deben centrarse más en alinear los valores de un individuo con los de su organización. Los líderes deben apoyar a sus equipos y sacar lo mejor de cada uno de sus miembros, independientemente del lugar de trabajo.

Algunas de las claves para lograrlo residen en:

– Los líderes, ante este nuevo escenario marcado por el mundo híbrido, deben eliminar los controles innecesarios sobre el lugar que eligen los individuos para trabajar.

– Menos reuniones, pero de más valor: el Chartered Institute for Personnel and Development (CIPD) recomienda la implantación de herramientas asíncronas para contrarrestar la creciente cultura de largas reuniones en línea.

– Fomentar la autonomía: las empresas que quieren innovar deben construir una cultura de gestión basada en la seguridad psicológica necesaria para que los miembros del equipo tomen la iniciativa. Los empleados deben sentirse libres para expresarse y formular nuevas ideas, sin miedo a ser juzgados o sancionados.

En definitiva, se trata de un cambio de escenario, que lleva implícito un cambio paralelo en las cualidades proyectadas por el líder.  Así lo resume el informe del Grupo Cegos: los líderes del mundo híbrido deben ser  atentos y curiosos con las ideas de los miembros del equipo. El aumento del trabajo híbrido también significa que los líderes necesitan desarrollar, a la par que sus equipos, mejores competencias interculturales. Generar confianza y credibilidad son vitales:  un artículo publicado recientemente por Forbes aconsejaba a los líderes estar presentes en el momento, involucrados de verdad. Esto les da espacio para comunicarse eficazmente y ser conscientes del trabajo de cada uno.